La historia de la Jarosita es preciosa. De una muy sutil belleza. Ha estado entre nosotros siglos, su grandeza es extraordinaria. Pero sólo cuando estas preparado y puedes conectar con su altísima vibración se muestra ante ti.

En la edad media era codiciada por Papas, Reyes y Arzobispos, en España, el Arzobispo de Toledo, a instancias del Papa, que ya lo explotaba en Tolfa, comenzó a buscarla, hasta encontrarla en el término de Cornago en La Rioja. Para vigilar su yacimiento compró el castillo de esa localidad y la explotación de la jarosita, en aquellos tiempos incluida entre las denominadas “piedras de alumbre”, tuvo una actividad frenética por lo menos durante ocho años entre 1462 y 1469.

¿Por qué eran tan importantes las piedras de alumbre, entre ellas la jarosita, en la edad media? El alumbre además de usarse para curtir el cuero, cicatrizante, pinturas etc., especialmente se empleaba para fijar los colores en los tejidos, los ricos podían pagar el tratamiento de sus ropajes con este producto natural y esto les diferenciaba de las clases inferiores.

Posteriormente la jarosita con otras piedras de alumbre fue explotada en abundancia en Mazarrón (Murcia) y Rodalquilar (Almería) hasta que en 1852 se hizo efectivo su descubrimiento, diferenciándola del resto. Fue en el Barranco del Jaroso en la Sierra Almagrera de Almería (España), donde quizá se encuentren los ejemplares más bellos del mundo. Su descubrimiento, como el de tantos otros minerales, paso totalmente desapercibido. Aún no estábamos preparados. En las explotaciones mineras como en Mazarón nadie le prestaba atención, era un producto secundario. 

Los geólogos han encontrado jarosita en parajes como Río Tinto (Huelva), Mazarrón (Murcia), Sierro Gordo (Chile) o Burra Burra (Australia), pero la mina almeriense es la localidad tipo de este mineral.   

El segundo descubrimiento fue en el 2004 y en Marte. La clave del anuncio de la NASA de que Marte tuvo un día lagos está en la jarosita, un mineral casi desconocido en aquel momento, y que demuestra de manera irrefutable que por las rocas marcianas pasó el agua. Para que este mineral se forme, es absolutamente necesaria e imprescindible una alteración acuosa. Si hay jarosita, hubo agua.

Fue el momento en el que se dio a conocer a lo grande. Periódicos, revistas, televisión. El momento en que la humanidad empezaba a estar preparara para conectar con su extraordinaria sutileza. ¿Pero que es la Jarosita?, desconocida casi hasta por los geólogos. Muchos tuvieron que mirar de nuevo los libros.

Químicamente, es lo que se denomina un mineral secundario o, lo que es lo mismo, que se produce a través de la alteración de un primario, en este caso hierro y potasio. Cuando el sulfuro de hierro sufre una oxidación, por su exposición al agua pasa a convertirse en un sulfato que es como se denomina a la jarosita. Es un mineral difícil de identificar, porque se puede confundir fácilmente con la Limonita y la Goethita. Es de un color amarillo pardo y lo más frecuente es que se presente en masas granulares, pulverulento o terroso, aunque a veces forma pequeños cristales tabulares. Entre sus propiedades destaca que es insoluble al agua. Es un sulfato de potasio y de hierro hidratado, es decir, que tiene oxígeno e hidrógeno.  

Espiritualmente es de una extraordinaria sutileza. En casa tenemos dos ejemplares. Se manifestó poco a poco a medida que podíamos captar su altísima vibración. Ahora tenemos ya conciencia de que estamos ante un cristal muy especial y la necesidad de trabajar con el. Al aplicárnoslo en acupuntura energética y utilizarlo en meditación se manifestó claramente. Lo identificamos con la Conciencia de la Sexta DimensiónCuándo más elevada es la vibración, más despacio se expresará en el plano físico., De ahí su sutileza y gran poder. 

El hacernos sensibles a este precioso cristal, recibimos una señal clara de que en planos sutiles estamos en la transición a la sexta matriz dimensional.  

Utilizada en acupuntura energética o meditación tiene unos efectos muy intensos, activa poderosamente los chakras transpersonales superiores. La sensación es que el cuerpo sube. El bienestar después puede prolongarse horas. Nuestro consejo es utilizarla en tiempos cortos, pues nuestro cuerpo físico necesita adaptación, nada de prisas con la Jarosita. Ella nos guiará en el camino, darlo por seguro, mostrando sus posibilidades y modos de utilización cuando sea el momento apropiado. Es aconsejable utilizar una Ferberita o Hematites para compensar, ya que estas nos activaran los transpersonales inferiores, arraigándonos más. 

Tiene que ver con propiedades de la sexta dimensión; la alegría, el juego, el amor, la inocencia superior. Se expanden desde el corazón, nacen de la comunicación con nuestro ser crístico. Nos viene una imagen para expresarlo. Es como estar en un bosque maravilloso, sentado al lado de un riachuelo de montaña, en comunión con los elementales, con el río, con el bosque, formando parte del todo. Nace de dentro una sensación de plenitud, amor muy expansiva y que tiene un lado muy práctico en la vida. Podemos ver las situaciones sin la trascendencia que a veces podemos darle. Es muy importarte el reírse desde dentro, el mundo ya no parece tan real ni tan importante, es un juego. 

Se combina muy bien con dos cristales de la nueva energía muy poderosos, ambos son de Wolframio. La Scheelita y la Ferberita, el resultado es espectacular. El primero de ellos, es algo mas del 80 % de oxido de wolframio y el resto de oxido de Calcio de color amarillo anaranjado a naranja. Es tan intenso como el segundo, la Scheelita trabaja en la adaptación energética y en la creación de las nuevas conexiones, son autopistas, que substituyen a los antiguos caminos estrechos y pequeños. La Ferberita, trabaja la transformación de nuestro cuerpo físico para que pueda soporta el nuevo nivel energético y activa los chakras transpersonales que nos conectan poderosamente con Gaia. Las dos canalizan la energía que aporta la Jarosita hacia estos objetivos.

Con Amor.

Carlos y Carmen
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